Mientras el TAP en el que viajaba hizo su tradicional escala en Los Mochis no pudo evitar notar que varios vendedores se suben al autobús, sin seguir protocolos sanitarios, le llamo la atención el que vendía relojes y cargadores. Tampoco pudo evitar observar que las personas entran y salen de esa terminal por donde les parece mejor, la mayoría por la zona de andenes.
Pero lo bueno es que si checan la temperatura de los pasajeros que suben.
Experiencia de JC Lugo F