Las unidades de Tufesa al llegar de un viaje ingresan a taller, donde se les revisa física, mecánica y el sistema eléctrico. Posteriormente se limpian a fondo usando sustancias a base de detergentes; posteriormente se mueve a la fosa, donde se continua la revisión.
La revisión de neumáticos incluye revisar la presión, integridad y profundidad del dibujo.
Se sube la maquina de ozono, la cual se deja trabajando con el autobús cerrado y con el aire acondicionado en operación por quince minutos, de esta forma se sanitiza a fondo, quedando lista para su siguiente viaje.
En la terminal encontramos tapetes sanitizantes, un modulo de control médico, señalizaciones de sana distancia, gel antibacterial y zona de taquillas con protecciones; además es estrictamente obligatorio el uso de cubrebocas.
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