Dina es la fabricante mexicana de autobuses mas importante del país, sus productos circulan en todas las ciudades importantes de la república moviendo miles de pasajeros diariamente a sus diferentes destinos; incluso se exportan a otros países.
A muchas personas lo primero que les viene a la mente al escuchar Dina es la dinastía de sus foráneos que dominaron las carreteras por décadas, el Olímpico se vendió de 1967 a 1986 prácticamente sin ningún cambio durante todo ese tiempo. Pero la nueva Dina poco tiene que ver con ese pasado, ahora tienen un departamento de innovación y controles de calidad muy altos; lo hemos comprobado de primera mano en una visita a su planta de producción.
La planta de Dina se ubica en las afueras de Ciudad Sahagun, en Hidalgo, a solo 45 minutos de la Ciudad de México; es la misma ubicación histórica de la antigua Dina, pero hasta ahí llega la semejanza. La nueva Dina luce una fabrica limpia, ordenada, con certificación ISO; produce principalmente unidades urbanas bajo un esquema de alta calidad sin dejar de lado la seguridad.
Se fabrican tanto el chasis como la carrocería de las unidades, ambos por lineas separadas que convergen al final en un ensamble sincronizado con tecnología de punta Principalmente proveen unidades integrales pero ya estan abiertos y trabajando con Marcopolo y Ayco para proveerles chasis para urbanos ligeros.
Al entrar a la planta de producción nos llama la atención la extensa platica sobre seguridad industrial, donde se nos provee de gafas, audífonos, punteras metálicas y chalecos reflejantes.
Fuimos testigos de la producción, desde cero de carrocerías y chasis, tanto de Runner como del Linner, e incluso observamos unidades Hustler en proceso y los autobuses secretos que se presentaran en Expo transportes el próximo 16 de Octubre en Puebla.
Los largueros en el inicio de la línea de producción y el robot soldador a la izquierda.
Primera etapa del chasis ya con suspensión y ruedas; la primera parte de la personalización a solicitud del cliente esta en el tipo de suspensión colocada.
Chasis ya con motor en posición trasera y componentes eléctricos e hidráulicos. Así inicia el Linner.
Chasis de unidades de Motor delantero, el Runner si es integral, o será la plataforma de unidades Ayco Zafiro y Marcopolo Spectrum.
Armado de la carrocería de un Linner.
En primer plano el motor Cummins en el chasis de un Linner; es la marca que tradicionalmente monta Dina en sus unidades, pero uno de sus lanzamientos en Expo Transporte 2019 es sobre su flexibilidad en este punto, ya que el cliente podrá elegir la planta de poder, entre las que habrá una opción china.
Ingenieros verificando una planta de poder Cumins, en toda la línea de producción existen equipos de computo que proporcionan información sobre el armado de cada unidad según las especificaciones de calidad.
En el fondo apreciamos las cocinas de pintura para las carrocerías, en primer plano un chasis de Runner ya listo para el montaje final.
Carrocería lista del Runner para el ensamble con el chasis, una vez juntos se hace la colocación de vidrios, asientos y detalles estéticos.
Una de las grandes novedades de Dina para el 2019 es el rediseño de sus tableros y volantes.
Innovación tecnológica de la planta son los elevadores que se utilizan en el montaje final de carrocería y chasis.
Uno de los proyectos secretos que verán su luz en Expo Transporte 2019.
Al fondo se observa el recinto de pruebas húmedas, donde se verifica que las unidades terminadas no tengan filtraciones de agua.
Productos listos para entrega, destaca el gran lote de Hustler, el camión de patio comercializado en Estados Unidos; el dato curioso de este equipo es la versatilidad de su motor, ya que puede ser a gas, gasolina o diésel.
Dina es ahora un referente de tecnología de punta, mejora continua e investigación constante para adaptarse a las nuevas tendencias mundiales.
A largo plazo podríamos verlos de nuevo en las carreteras con modelos Foráneos de alto desempeño, todo puede pasar.