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| foto en Sabinas Hidalgo, de otro viaje distinto al narrado |
Que bonito es viajar en Ómnibus de México, la línea que le gustaba tanto a mi bisabuela sigue igual que siempre, pintada de azul con las mismas taquillas y rutas, así sabemos que nunca han cambiado nada y es lo mismo que mi abuela vivió junto con su mama, claro los autobuses de entonces, esas carrozas de metal ruidoso ya no andan, seguro por viejitos, pero ahora tienen unos bien bonitos que tienen un logo de Volvo al frente pero por dentro son igualitos a los de antaño.
Por eso siempre pido mi ticket en la taquilla de Ómnibus aquí en Ciudad Juarez, y porque se que con ellos llego cuatro horas antes que con las demás líneas, ha de ser porque se van por una ruta más corta.
Me gusta que el autobús va parando por todos lados, así si hambre me da siempre puedo comprar burritos si aun vamos por Chihuahua, enhiladas al pasar por Zavatecas y tacos ya por el centro del país. Aunque lo mejor es la parada a desayunar en el restaurante favorito de los operadores.
También me gustan harto las películas que pasan en las pantallas que estan en el techo, muy bonitas, en español y sin violencia, a todo dar que se viaja, y si te anda ganando del baño, traen un sanitario que casi siempre trae papel.