Los usuarios de los autobuses de Transport for London (Tfl) se han hartado y han solicitado que se deshagan de los nuevos anuncios de seguridad tan sólo cinco días después de su lanzamiento. Los mensajes automáticos que advierten “please hold on, the bus is about to move” se introdujeron en la flota de TfL el lunes durante un período de prueba de cuatro semanas. La intención es alertar a los pasajeros para que se agarren a las barras de seguridad cuando el autobús sale de la parada. Pero un error técnico y temporal en el momento de emisión del mensaje lo hace insoportable para los usuarios.
TfL explicó que unas “3.000 personas resultan heridas cada año a causa de resbalones, tropiezos y caídas en los autobuses de Londres”. Por lo que creen que estos mensajes harían los viajes más seguros. Sin embargo, los usuarios creen que los accidentes en los autobuses ocurren porque la gente “lleva la compra en una mano y en la otra el teléfono móvil”.
El director de operaciones de autobuses de TfL, Claire Mann, explicó que “la seguridad de los pasajeros es la principal prioridad, así que hemos estado probando este anuncio para evaluar si ayuda a reducir el número de personas heridas en resbalones y caídas”.
Las críticas de los usuarios de los autobuses de Londres
La gente que usa diariamente los autobuses para desplazarse por la ciudad ya no soportan más estos mensajes ya que, según una usuaria habitual, “son muy molestos. La gente sabe que el autobús se va a mover, ese es el sentido de los autobuses”. Además, el fallo en el momento de la emisión del mensaje de seguridad no lo hace efectivo. “No tiene sentido y es una tontería porque los anuncios llegan mucho después de que el autobús haya reanudado el viaje”, explica una viajera.
