Si uno quiere que lo atiendan muy rápido en una taquilla de la Central de Autobuses del Norte de la Ciudad de México a la zona de Senda se debe de acercar, por alguna razón nunca hay filas, los promotores son sonrientes y agiles en la expedición del boleto y lo mejor, tienen bastante sentido del humor. Es genial bromear con ellos y te lo comprendan e incluso se presten al juego.
La sala 3 de dicha central es por decirlo de buena manera: fea, pequeña y poco funcional; pero el acceso a andenes es agil.
El Scania irizar PB con la pintura de Transportes del Norte Diamante luce un brillante letrero que anuncia el destino esperado, los dos operadores y la edecan se esmeran en dar la bienvenida a los pasajeros, el maletero en ningún momento solicita propina alguna.
Al abordar el autobús es muy limpio y lo primero que me llama la atención son los asientos azules de generación muy pasada, sin soporte lumbar ni cabecera, pero con mucho espacio entre ellos, son solo 32 y la ausencia de mampara trasera proporciona valiosos centimetros adicionales.
La salida es con cinco minutos de retraso y de inmediato descubro que la ciudad tiene cada momento mas baches. En Cuautitlan existe una miniterminal de Senda medio escondida, donde hacemos una parada express, saliendo de esta escala el operador se presenta de nuevo por los altavoces, explica las amenidades del autobús y explica que el trayecto es directo con once horas de camino por delante.
El Autobús cuenta con solo 32 butacas con suficiente espacio entre ellas para que los pasajeros no se sientan invadidos en el espacio, para entretenimiento cada lugar cuenta con sistema de audio y video individual, donde resalta que las funciones de internet de la tablet funcionan de maravilla, en caso de no estar en cobertura pone un letrero de que no hay señal disponible.
El contenido multimedia incluye titulos de acción, mexicanas, drama y unas infantiles; el menú tiene otras categorias pero en realidad no son lo que se anuncia, quiza porque hay que cuidar que el contenido sea apto para todas las edades.
Decepciona que se anuncie un concierto de Queen y solo sea un aburrido documental.
Los descansapiernas son del modelo "olvida tus tobillos" son bastante molestos, tanto que termine con algunos rasguños; no es recomendable usarlos; a cambio existe el clásico portavasos que vimos en primera Plus, un portavasos deslizante debajo del asiento.
Los asientos en tela cumplen con viajes de dos horas, intentar dormir en ellos sin almohadas es complicado, pero hay cinturones de seguridad.
Dos sanitarios, uno exclusivo para damas, son higienicos y en olor se ganan un 9 al salir y un 7 al llegar, el avituallamiento es suficiente, pero lo que mas ayuda es que el autobús solo lleva 16 pasajeros.
La edecan al abordar deja que los pasajeros elijan su bebida con calma, pero son solo refrescos con alto contenido calorico y agua al tiempo, se agradeceria aguas saborizadas o sodas zero. En la simpatica y ruidosa bolsita tambien hay un sandwich algo precario y unas mini sabritas; y al fondo unos simpaticos audifonos económicos pero bonitos, en su bolsa que dice "Senda" y con la misma leyanda impresa en ellos a manera de marca, más de uno los usara sin pudor con un ipod.
En la carretera continuan los baches, la dura suspensión nos permite percatarnos de ese hecho sin lugar a dudas, para compensarlo de vez en cuando hay bamboleos y oscilaciones, como los asientos tienen cierta dureza es dificil conciliar el sueño, y más si consideramos que hubo tres retenes de federales que solicitaban identificarse a cada pasajero, y que en algún lugar los operadores necesitarón alimentarse por lo que nos dejan encerrados en la unidad en un rincón de una gasolinería, al menos deberian dejar bajar a tomar fotos tal como hacen los de Chihuahuenses Select.
Despues mas baches, retenes, bamboleos y desfile de personas al sanitario, mas batalla con los descansapiernas.
Los acabados del autobús son buenos, incluyen aluminio en algunas zonas pero se extraña mas calidad en pisos y laterales.
En resumen, se observa que la unidad es de equipamiento ejecutivo pero tratando de economizar donde fue posible, la experiencia de viaje es buena en atención del personal pero en comodidad preferiria hasta un MP120.
Lo bueno: Atención en taquilla, velocidad de venta, amabilidad del operador, imagén exterior del autobús, el servicio directo.
Lo mejor: El espacio entre asientos, contenido multimedia, enchufes electricos y wifi.
Lo mejorable: Los asientos y sus descansapiernas, el sandwich.
El detallazo: Poner el aire acondicionado en helado al llegar a Monterrey, para que no suframos un cambio brusco de temperatura al bajar.
La sorpresa: La nueva Central de Autobuses de Monterrey, moderna y amplia, pero se ve pequeña ante la demanda.
El souvenir: Los audifonos.