Oaxaca de Juárez • Un grupo de sujetos armados y encapuchados asaltó la a los pasajeros de un autobús de la empresa Autobuses Unidos (AU) entre las comunidades de Putla de Guerrero y Tlaxiaco, en la región de la Mixteca en Oaxaca, despojando de sus pertenencias a los pasajeros y lesionando a siete, dos de ellos de gravedad.
La Procuraduría de Justicia Estatal, reportó que entre los lesionados se encuentra Juan Cepeda Cortés, hermano del presidente municipal de Eloxochitlán de Flores Magón, y Fernando Palacios Chazares que incluso fue arrojado a la carpeta asfáltica por los perpetradores.
El asalto ocurrió cuando el autobús de la línea AU, partió rumbo a la Ciudad de México, en inmediaciones del paraje "Puente de Fierro" donde supuestamente subieron varios sujetos encapuchados, con garrotes y gases lacrimógenos.
Después de la media noche arribaron agentes del ministerio público, en tanto la Policía Estatal permanece en la zona.
El Subprocurador de Justicia en la zona Víctor Alonso Altamirano, informó que los criminales lograron abordar la unidad cuando el conductor refirió haberse detenido para comprar un café, cuando repentinamente llegó al lugar una camioneta sin rótulos, y desde el interior personas habrían dispararon, impactando en uno de los neumáticos y en una ventana del lado derecho del autobús.
Dijo que los individuos golpearon a siete personas con palos y tubos; y realizaron detonaciones de arma de fuego dentro del autobús.
“El asalto se perpetró en la madrugada, al parecer el autobús habría salido del municipio del municipio de Eloxochitlán de Flores Magón con rumbo al Distrito Federal”.
Indicó que en el lugar fue asegurado un casquillo calibre veintidos, mismo que quedo integrado a la respectiva averiguación previa iniciada.
A este hecho delictivo se suma el intento de asalto a una familia, a quien cuatro encapuchados les dispararon para marcarles el alto sobre la carretera que va de Oaxaca a Puerto Escondido, a la altura del municipio de Sola de Vega y un asalto más perpetrado contra un autobús de la línea ADO, donde los ocupantes despojaron de sus pertenecías a los tripulantes, tras abordar la unidad en la terminal Tapo de la capital del país.
El Comisionado de la Policía Estatal agregó que se cuenta con información respecto a que el grupo agresor se aposto en la carretera y apuntó al operador exigiéndole que abriera la puerta de la unidad; después desviaron aproximadamente 150 metros fuera de la cinta asfáltica el autobús en donde finalmente concretaron el robo a los aproximadamente 40 tripulantes.
“Sabemos que el robo fue solo de equipaje, dinero en efectivo y aparatos celulares, aunque lamentamos que haya cuatro personas heridas por oponerse al asalto”.
En tanto la Cámara del Transporte en Oaxaca denunció que han aumentado en los últimos 11 meses los asaltos carreteros, sostienen que hay gavillas de hombres armados que desvalijan a los turistas y a los vehículos que cruzan por las diversas carreteras locales.
El dirigente del organismo Miguel Ángel Medina reportó que la inseguridad ha generado que disminuyan en más de un 35 por ciento las corridas en el horario nocturno y vespertino.
Definió como los tramos carreteros más peligrosos lo que se ubican en la zona costera, particularmente los caminos que conduce al municipio de San Pedro Pochutla y Candelaria Loica, así como el que traslada peregrinos al santuario de la Virgen de Juquilla y a la comunidad de Sola de Vega.
También se reportan asaltos en los tramos Putla de Guerrero-Pinotepa Nacional, Palomares-Matías Romero y la zona de Juchitán, además de la carreta Loma Bonita –Tuxtepec, donde se diversos tramos se perciben la presencia de grupos de personas armadas que montan retenes ilegales.
Reconoció que son zonas inhóspitas, donde no hay alumbrado, ni patrullajes, mucho menos vigilancia comunitaria.
Argumentó que tan solo en este año han sido denunciados asaltos en contra de tres autobuses de líneas comerciales de las empresas Cristóbal Colón y Sur.
Medina argumentó que los asaltos en ocasiones son solo para quitarle la cuenta al operador de la unidad de transporte, que en ocasiones no carga más de 3 mil 500 pesos. También se hace bajar al pasaje para despojarles de sus pertenencias, ropa, dinero, alhajas o teléfonos celulares.