Reseña de Maxibuses:
Al fin llegaron las vacaciones y desde hace tiempo tenía planeado un viaje al bello paraíso que es Cancún, así que decidí aprovechar una excelente promoción que me incluía la transportación, el dilema surgió al decidir el medio de transporte, ¿Avión o Autobús? un dilema que en lo personal fue difícil de elegir, ya que en lo personal me agrada más viajar en autobús, sin embargo, un viaje a Cancún, desde la Ciudad de México, es un viaje épico de más de 23 horas, al checar las corridas me doy cuenta que ADO, solo ofrece su servicio de primera con sus 44 asientos o su servicio de Gran Lujo, ADO GL, con sus 40 asientos, así que la decición se hace más fácil, el medio a utilizar para la transportación es el avión, ¿Pero que línea? hay tantas opciones y horarios, sin embargo, un par de líneas llaman mi atención, se trata de Viva Aerobus, línea que conosco ya que se asocia con Grupo IAMSA y diferentes líneas de Autobuses o una tal línea "Volarís" de la cuál me han comentado varios aspectos positivos.
Me decido a apartar mi vuelo por Volaris, escogiendo una salida a las 8 de la mañana desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, me aconsejan llegar una hora y media antes, para registrar mi equipaje y poder registrarme e imprimir mis pases de abordar, para lo que necesito llevar una identificación oficial. El día llega, por cuestiones personales decido llegar a las 6 de la mañana, con dos horas de anticipación, teniendo conocimiento de que es temporada vacacional, total llego a la Terminal 1, a la sección de Volaris donde me encuentro con un completo caos, al parecer una de las cuestiones por las cuales Volaris es una línea de bajo costo es por su escaso personal, él cuál se esfuerza de buena forma para atender a los pasajeros e informarles en donde formarse, pero resultan sobrepasados por la cantidad de pasajeros.
Formado espere 1:30 minutos, algo que me pareció increíble ya que prácticamente estuve formado el tiempo que haría de vuelo mi avión de México a Cancún; al llegar con el personal de Volaris para registrarme me sorprende que hay una señora con un par de niños llorando de forma desesperada, al parecer el encargado perdió su equipaje que contenía algunas cosas con gran valor sentimental para ellos, en fin, con un poco de miedo por lo que vi dejo mis maletas en manos del personal de Volaris y me dirijo a abordar el avión, con la sorpresa de que el encargado, por cuestiones que sigo sin entender, decidió poner a los integrantes de mi familia prácticamente cada uno en cada esquina del avión en lugar de ponernos juntos.
Me toca un avión que luce bastante bien, el aire acondicionado es muy bueno, presenta 120 asientos, con muy poco espacio entre ellos, esto se resiente después de 30 minutos de estár sentado en ellos, los asientos en teoría son reclinables, pero dicha reclinación es totalmente mínima. Lo que me sorprende es que el avión cuenta con pantallas planas muy pequeñas, en las cuales se anuncia publicidad, tras publicidad, parecía prácticamente un canal de comerciales. Ahora bien, volteo a registrar mi asiento y me llevo la grata sorpresa que tiene enchufes eléctricos y audio individual, cuestión que se agradece ya que cuenta con varios canales de diferentes tipos de música, sin embargo, las aeromozas no dan audífonos así que solo los que llevamos nuestros propios audífonos podemos aprovechar dicho servicio.
El avión despega con 25 minutos de retraso, las aeromozas son bastante amigables y muy bonitas, explican y tratan de atender a todos los pasajeros con un trato humano que me impresionó, ya que a lo largo del vuelo atendieron a personas mayores, así como a niños espantados por el ruido del avión. En el vuelo se ofrece un bocadillo bastante sencillo que en sí se agradece, ahora bien, el vuelo es bastante tranquilo y en 1:45 minutos estamos en Cancún.
Volaris es una línea que no me convenció del todo pero que por lo menos ofrece un servicio bastante coherente con sus precios, lo único que me desagradó un poco fue la actitud del personal de la Ciudad de México, ya que su actitud es poco humana y muy prepotente, mientras que sus empleados en Cancún tienen una mentalidad bastante amigable, preocupándose por informar y estar en contacto con los pasajeros. Otro factor a considerar es el espacio entre asientos en Volaris, ya que para viajes de más de 6 horas podría resultar muy incomodo.