Las alegrías se posicionaron en el cuarto lugar de nuestro conteo con el 6.11% de las menciones. Estos dulces mexicanos se encuentran en la mayoría de los mercados mexicanos. Son elaborados a base de amaranto uno de los principales cultivos de la época prehispánica, pues además de servir como alimento era el elemento ceremonial de mayor relevancia entre los antiguos mexicanos. El amaranto es una planta de flores aterciopeladas cuyas semillas, que son un cereal, se aprovechan junto con la miel, para elaborar las ya tradicionales alegrías.
Sigue esta receta para elaborar tus propias alegrías:
Sigue esta receta para elaborar tus propias alegrías:
Ingredientes (para 40 piezas)
- 1 kilo de amaranto tostado
- 1 kilo de azúcar
- 1/2 kilo de miel de abeja
- 1 litro de agua
- 6 aros de metal galvanizado de 3 cm de ancho
Preparación
En un cazo se ponen a fuego medio el agua, el azúcar y la miel, moviendo con una cuchara; se deja hervir hasta que la miel que se forma tome punto de hebra, entonces se saca del fuego y se le añade el amaranto; esto se mezcla muy bien con una cuchara hasta formar una pasta.
Los aros se colocan sobre una mesa de madera bien limpia y húmeda, se llenan con la pasta y se prensan con círculos de madera o con unos platitos. Luego las alegrías así formadas se sacan y se dejan enfriar completamente.
También al llenar los moldes se les puede hacer con los dedos una orillita para que queden en forma de cazuelitas, pero esto hay que hacerlo cuando estén tibios para no quemarse. Por último, se les pone en el centro un poco de miel y cualquier clase de nueces que se prefieran, además de pasitas y acitrón si se desea.
En las tiendas naturistas se puede encontrar el amaranto en varias presentaciones.
Nota. Los aros se pueden hacer lavando muy bien unas latas de atún y abriéndolas por ambos lados.
Los aros se colocan sobre una mesa de madera bien limpia y húmeda, se llenan con la pasta y se prensan con círculos de madera o con unos platitos. Luego las alegrías así formadas se sacan y se dejan enfriar completamente.
También al llenar los moldes se les puede hacer con los dedos una orillita para que queden en forma de cazuelitas, pero esto hay que hacerlo cuando estén tibios para no quemarse. Por último, se les pone en el centro un poco de miel y cualquier clase de nueces que se prefieran, además de pasitas y acitrón si se desea.
En las tiendas naturistas se puede encontrar el amaranto en varias presentaciones.
Nota. Los aros se pueden hacer lavando muy bien unas latas de atún y abriéndolas por ambos lados.