Ciudad de México (13 octubre 2010).- Aviacsa tendrá nuevas alas.
De la mano de Grupo Madero, presidido por el coahuilense Ramón Madero Dávila, Aviacsa, volverá a volar a partir del próximo 15 de diciembre.
La aerolínea volará de inicio con sólo 5 aviones, de los 25 que operaba antes de ser suspendida en julio de 2009.
Para poner a Aviacsa en operación, los nuevos dueños pagarán 893 millones de pesos de los adeudos de la compañía que entró en concurso mercantil hace un año.
Además, la empresa recibirá inyecciones de capital por 358 millones de dólares (unos 4 mil 504 millones de pesos), de los que Grupo Madero aportará directamente 108 millones de dólares, se describe en el Plan de Negocios al que REFORMA tuvo acceso.
De los 893 millones que va a pagar, 300 millones se liquidarán en tres años al SAT y a Servicios de Navegación al Espacio Aéreo Mexicano (Seneam), de un total de 500 millones que se debían originalmente, es decir, en este apartado hubo una quita del 40 por ciento.
Otros 300 millones de pesos, de un original de mil millones, también se completarán en tres años a acreedores particulares, con lo que aquí el descuento que se logró en el concurso mercantil fue del 70 por ciento.
Grupo Madero otorgará, además, en dación de pago, un terreno de 600 hectáreas en La Paz, Baja California Sur, para cubrir la deuda de Aviacsa con Aeropuertos y Servicios Auxiliares, que asciende a 293 millones de pesos.
En el documento aparece un plan de vuelo de cinco etapas para ir ganando altura en las operaciones durante 13 meses.
Para el 15 de diciembre se planea despegar con cinco aviones, para luego sumar otros cuatro en febrero del 2011; seis más en marzo; cuatro en abril; uno en julio, y después dos adicionales hasta enero de 2012.
Así sumaría 20 aeronaves hasta pasado más de un año en el aire, con la idea que a partir de entonces el mercado dé para incorporar dos unidades cada 500 días.
Para fines de 2011, el nuevo grupo de inversionistas cree que estarán dadas las condiciones para renovar la flota con aviones de última generación mediante financiamientos que podrían llegar a mil 200 millones de dólares.
Gerardo Sánchez Henkel, titular de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la SCT, dijo que la autoridad no ha sido notificada oficialmente del cambio de dueño de Aviacsa.
Una vez formalizada la petición, señaló, la dependencia verificará todos los requisitos para su reinicio.
Aviacsa, que se encuentra en concurso mercantil desde el 4 de noviembre de 2009, aún mantiene los horarios de salida y llegada en los diferentes aeropuertos, conocidos como "slots", y fuentes sostienen que además mantiene relación con unos 200 empleados, de mil 650 que tenía.
Cuando vuelva a volar en diciembre sólo cubrirá unos cuatro o cinco destinos, de los 19 que llegó a operar.
La puesta en tierra de Aviacsa en julio de 2009 siguió a meses de desencuentros con las autoridades aeronáuticas que la empezaron a perseguir por sus adeudos por combustible y derechos de operación, y luego por fallas mecánicas que le fueron encontradas en su naves.
En enero del año pasado, la SCT le hizo un primer embargo administrativo a 13 aeronaves por adeudos vencidos con Aeropuertos y Servicios Auxiliares de 120 millones de pesos por combustible.
Luego, el 3 de junio, procedió la suspensión a las 25 naves por fallas en mantenimiento, que Aviacsa aseguraba eran menores y no ponían en riesgo a los pasajeros.
Aviacsa consiguió por unas semanas más amparos provisionales de un juez federal de San Luis Potosí para seguir operando, hasta que ya no fue posible más.
Humberto Treviño Landois, subsecretario de la SCT, llegó a declarar en repetidas veces que las posibilidades de que Aviacsa volviera a volar eran casi nulas.
"Ojalá se pueda recuperar algo de la inversión de los aviones y le puedan pagar a los acreedores", declaró en un ocasión refiriéndose a los 497 que hacían fila para cobrar.
Pero ahora, ya con un acuerdo con Ramón Madero Dávila, el presidente de Grupo Madero, los mostradores de Aviacsa, que se han mantenido en diferentes aeropuertos del País, podrían estar a dos meses de reabrir.
Denuncian a Mexicana en EU
Un consorcio de nueve aeropuertos de Estados Unidos acusó a la empresa Mexicana de Aviación de haberlos engañado con promesas de que pagaría deudas que, hasta la fecha, siguen pendientes.
La aerolínea se habría comprometido por escrito y ante una corte de bancarrotas de Nueva York a liquidar a más tardar el 15 de septiembre pagos pendientes por tarifas de uso de aeropuerto.
La empresa con terminales en Los Ángeles, Washington, Dallas-Fort Worth, Denver, San Francisco, Sacramento, San José, Nueva York y Orlando pidió a un juez que dicte una orden exigiendo a Mexicana el pago inmediato de sus obligaciones.
También advirtió que tomará acciones legales paralelas al proceso de concurso mercantil.
De la mano de Grupo Madero, presidido por el coahuilense Ramón Madero Dávila, Aviacsa, volverá a volar a partir del próximo 15 de diciembre.
La aerolínea volará de inicio con sólo 5 aviones, de los 25 que operaba antes de ser suspendida en julio de 2009.
Para poner a Aviacsa en operación, los nuevos dueños pagarán 893 millones de pesos de los adeudos de la compañía que entró en concurso mercantil hace un año.
Además, la empresa recibirá inyecciones de capital por 358 millones de dólares (unos 4 mil 504 millones de pesos), de los que Grupo Madero aportará directamente 108 millones de dólares, se describe en el Plan de Negocios al que REFORMA tuvo acceso.
De los 893 millones que va a pagar, 300 millones se liquidarán en tres años al SAT y a Servicios de Navegación al Espacio Aéreo Mexicano (Seneam), de un total de 500 millones que se debían originalmente, es decir, en este apartado hubo una quita del 40 por ciento.
Otros 300 millones de pesos, de un original de mil millones, también se completarán en tres años a acreedores particulares, con lo que aquí el descuento que se logró en el concurso mercantil fue del 70 por ciento.
Grupo Madero otorgará, además, en dación de pago, un terreno de 600 hectáreas en La Paz, Baja California Sur, para cubrir la deuda de Aviacsa con Aeropuertos y Servicios Auxiliares, que asciende a 293 millones de pesos.
En el documento aparece un plan de vuelo de cinco etapas para ir ganando altura en las operaciones durante 13 meses.
Para el 15 de diciembre se planea despegar con cinco aviones, para luego sumar otros cuatro en febrero del 2011; seis más en marzo; cuatro en abril; uno en julio, y después dos adicionales hasta enero de 2012.
Así sumaría 20 aeronaves hasta pasado más de un año en el aire, con la idea que a partir de entonces el mercado dé para incorporar dos unidades cada 500 días.
Para fines de 2011, el nuevo grupo de inversionistas cree que estarán dadas las condiciones para renovar la flota con aviones de última generación mediante financiamientos que podrían llegar a mil 200 millones de dólares.
Gerardo Sánchez Henkel, titular de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la SCT, dijo que la autoridad no ha sido notificada oficialmente del cambio de dueño de Aviacsa.
Una vez formalizada la petición, señaló, la dependencia verificará todos los requisitos para su reinicio.
Aviacsa, que se encuentra en concurso mercantil desde el 4 de noviembre de 2009, aún mantiene los horarios de salida y llegada en los diferentes aeropuertos, conocidos como "slots", y fuentes sostienen que además mantiene relación con unos 200 empleados, de mil 650 que tenía.
Cuando vuelva a volar en diciembre sólo cubrirá unos cuatro o cinco destinos, de los 19 que llegó a operar.
La puesta en tierra de Aviacsa en julio de 2009 siguió a meses de desencuentros con las autoridades aeronáuticas que la empezaron a perseguir por sus adeudos por combustible y derechos de operación, y luego por fallas mecánicas que le fueron encontradas en su naves.
En enero del año pasado, la SCT le hizo un primer embargo administrativo a 13 aeronaves por adeudos vencidos con Aeropuertos y Servicios Auxiliares de 120 millones de pesos por combustible.
Luego, el 3 de junio, procedió la suspensión a las 25 naves por fallas en mantenimiento, que Aviacsa aseguraba eran menores y no ponían en riesgo a los pasajeros.
Aviacsa consiguió por unas semanas más amparos provisionales de un juez federal de San Luis Potosí para seguir operando, hasta que ya no fue posible más.
Humberto Treviño Landois, subsecretario de la SCT, llegó a declarar en repetidas veces que las posibilidades de que Aviacsa volviera a volar eran casi nulas.
"Ojalá se pueda recuperar algo de la inversión de los aviones y le puedan pagar a los acreedores", declaró en un ocasión refiriéndose a los 497 que hacían fila para cobrar.
Pero ahora, ya con un acuerdo con Ramón Madero Dávila, el presidente de Grupo Madero, los mostradores de Aviacsa, que se han mantenido en diferentes aeropuertos del País, podrían estar a dos meses de reabrir.
Denuncian a Mexicana en EU
Un consorcio de nueve aeropuertos de Estados Unidos acusó a la empresa Mexicana de Aviación de haberlos engañado con promesas de que pagaría deudas que, hasta la fecha, siguen pendientes.
La aerolínea se habría comprometido por escrito y ante una corte de bancarrotas de Nueva York a liquidar a más tardar el 15 de septiembre pagos pendientes por tarifas de uso de aeropuerto.
La empresa con terminales en Los Ángeles, Washington, Dallas-Fort Worth, Denver, San Francisco, Sacramento, San José, Nueva York y Orlando pidió a un juez que dicte una orden exigiendo a Mexicana el pago inmediato de sus obligaciones.
También advirtió que tomará acciones legales paralelas al proceso de concurso mercantil.