Daniel Blancas Madrigal | Nacional
Jueves 30 de Sep., 2010 | Hora de creación: 22:55| Ultima modificación: 00:21
El reclutamiento, por medio de amenazas, de expendedores de boletos de autobús es otro de los mecanismos utilizados por redes delincuenciales para detectar indocumentados, extorsionarlos o secuestrarlos, denunció la Pastoral de Migrantes de Movilidad Humana.
Este modo de operación ha sido documentado en la región oaxaqueña del Istmo, donde se corroboró la participación en estas células de policías judiciales y federales.
En esta zona, empleados de la empresa de transporte Oaxaca-Istmo denunciaron que han sido amenazados por “uniformados” si no reportan la compra de pasajes por inmigrantes, a quienes pretenden ubicar para robarles o exigirles dinero.
Uno de los casos más recientes fue presentado por un agente de la Pastoral —Alberto Donis— con base en fotografías, grabaciones y testimonios de afectados; descubrió en flagrancia a tres elementos de la Agencia Estatal de Investigación.
Según su informe, esto ocurrió la noche del lunes 27 de septiembre, en la terminal de la compañía Oaxaca-Istmo de Ciudad Ixtepec.
Extorsión. “Soy de la Policía Judicial, hay que pagar una tarifa para pasar por aquí”, dijo el supuesto agente a un grupo de 10 inmigrantes centroamericanos mientras les mostraba su placa.
“¿Por qué?... Sólo estamos esperando el autobús, no estamos cometiendo ningún delito”, objetó uno de los indocumentados, a la espera de abordar un camión rumbo a Oaxaca.
“Tienen que pagar o más adelante los vamos a tumbar, son 300 pesos por cada uno, si pagan aquí ya no van a tener problemas adelante”, insistió el “agente”.
Otro judicial entró a escena, contó a los centroamericanos y expresó: “Mejor hay que cobrarles 400”.
Miedo. Transportes Oaxaca-Istmo reconoció que sus empleados han sido intimidados por judiciales y federales: “Si no cooperan con la red, tendrán problemas”…
Una de las vendedoras de boletos narró: “Los policías han pasado varias veces, amenazándonos, ofreciéndonos dinero para trabajar con ellos y que les informemos cuando migrantes lleguen a comprar sus tickets”.
El 19 de agosto atestiguó cómo una persona identificada como PF robó a un grupo de inmigrantes 10 mil pesos.
Donis, colaborador de la Pastoral y del Albergue Hermanos del Camino, ha sido amagado por divulgar la información. Denunció la complicidad de policías con personal del Instituto Nacional de Migración y aseguró: “Los migrantes que vienen en el tren están utilizando otras rutas para viajar hacia el norte porque la delincuencia organizada los está secuestrando”.