La situación de Mexicana de Aviación se complica. Ayer, dos vuelos procedentes de Montreal y Calgary a México fueron cancelados debido a que las autoridades canadienses detuvieron las aeronaves con el fin de esclarecer la situación de cumplimiento de obligaciones de la aerolínea con uno de sus arrendadores “por los supuestos rumores respecto de la situación financiera de Compañía Mexicana de Aviación (CMA) que han circulado en los medios nacionales”.
La aerolínea informó que destina todos sus esfuerzos para lograr un acuerdo con sus trabajadores que le permita mantener la viabilidad operativa, pero sobrecargos y pilotos dijeron en conferencia que es inaceptable justificar una quiebra por los costos laborales.
Mexicana detalló que la información publicada sobre su situación financiera es errónea, por lo que consideró que las acciones por parte del arrendador no se encuentran debidamente justificadas y trabaja con las autoridades correspondientes para esclarecer el malentendido y evitar mayores afectaciones.
Opciones a trabajadores
El comunicado fue difundido un par de horas después de que las asociaciones sindicales de pilotos y sobrecargos ofrecieron una conferencia de prensa en la que informaron que la propuesta de Compañía Mexicana de Aviación es recortar en 30% la plantilla laboral, equivalente a unos 700 trabajadores, reducir su salario en 40 a 50% y cancelar 70% del clausulado de su contrato colectivo de trabajo.
Lyzette Clavel y Fernando Perfecto, secretarios generales de las asociaciones sindicales de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA) y de Pilotos Aviadores de México (ASPA), respectivamente, comentaron que el presidente del Consejo de Administración de Mexicana, Gastón Azcárraga, les presentó tres alternativas: la reestructuración operativa del contrato colectivo del trabajo, la venta de la aerolínea a los sindicatos y el concurso mercantil.
Perfecto dijo que la empresa es la única que puede decidir si opta por el concurso mercantil, no los trabajadores, pero no se puede aceptar que la aerolínea diga que tuvo que llegar a este proceso debido a que los trabajadores no aceptaron la reducción y modificación del contrato colectivo, añadió.
Agregó que los trabajadores están dispuestos a lograr una solución de fondo y de largo plazo para mantener a la compañía, pero estas condiciones deben ser respaldadas por un plan de negocios viable, una administración transparente y auditable.
Lyzette Clavel dijo que es necesaria la intervención de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para que revise el cumplimiento dé los compromisos que adquirió la empresa cuando obtuvo la concesión, y de seguimiento a cada uno de los puntos del plan de negocios para encontrar el origen de la situación actual.
Mencionó que el planteamiento de venta de la empresa a los sindicatos implica la creación del Nuevo Grupo Aeronáutico para vender a los trabajadores una unidad de negocios sin marca para atender rutas internacionales y que los accionistas actuales mantengan las operaciones domésticas.
Fernando Perfecto dijo que en caso de que sus agremiados acepten la opción de compra, buscarían inversionistas nacionales o extranjeros para realizar la adquisición.
En entrevista con EL UNIVERSAL realizada en mayo, Manuel Borja, director de Mexicana dijo que la deuda de la aerolínea ascendía a 200 millones de dólares y que sus principales acreedores eran Bancomext y Banorte.