El Universal
Sábado 22 de mayo de 2010
La inseguridad y desastres naturales han limitado la labor, informó
GUANAJUATO
El presidente del INEGI, Eduardo Sojo Garza Aldape, admitió que la inseguridad y la violencia asociada al narcotráfico podría limitar la labor de los encuestadores del Censo de Población y Vivienda 2010, en determinadas regiones del país.
El funcionario pidió respeto y confianza a los 106 mil trabajadores que por cuatro semanas recorrerán el territorio nacional para la integración del conteo.
“Nuestra prioridad es la seguridad de nuestros encuestadores, esperamos que haya confianza y respeto al trabajo del INEGI y podamos ir a todo el país”, enfatizó Sojo Garza, tras una reunión con líderes de la Concamin.
El censo se desarrollará del 31 de mayo al 25 de junio, informó Sojo Garza a los industriales. “Nuestro objetivo es ir a todos los rincones del país, a cada manzana, a cada comunidad”.
Sin embargo, recordó que por problemas de seguridad ha habido lugares que en el pasado no se han podido censar, como en 1995 fue por la presencia de la guerrilla en los altos de Chiapas, y en otros casos por desastres naturales.
Eduardo Sojo explicó que en esa meta de entrar a todas las localidades del país el INEGI está buscando diferentes estrategias, como pedir apoyo a los líderes de comunidades, maestros, doctores, encargados de los Centros de Salud, para que nos ayuden con los pobladores.
Zonas difíciles
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) proyecta ir a las casi 1.6 millones de manzanas, cerca de 300 mil localidades rurales y más de 21 mil condominios horizontales.
“Ahorita los supervisores están recorriendo las zonas para ver donde se tiene dificultad; hay zonas donde es más difícil el acceso, entonces tienen que planear bien la ruta de llegada, pueden enfrentarse algunos lugares donde tengan problemas de inseguridad”, explicó Eduardo Sojo.
Los encuestadores se identificarán con una credencial con fotografía de la institución, chaleco, mochila y chamarra. Todos ellos están en una base de datos en internet y las personas que tengan alguna duda podrán llamar un número de lada 800 para cerciorarse sobre la calidad de la persona que los visita.
El titular del INEGI dijo que en el pasado ha habido circunstancias donde no se censan algunas localidades, normalmente muy pequeñas, que no son significativas desde el punto de vista de información nacional.
En 2005, no fueron censadas 9 mil viviendas en diversas localidades, cifra que comparada con los 25 millones de casas que hay en el país no es representativa.
En esas ocasiones no se tiene clasificado a detalle el porqué no se tuvo acceso a algunas localidades por aspectos de seguridad, pero, por ejemplo, en 1995 fue por la cuestión de la guerrilla en Chiapas, y en otros casos por desastres naturales.
Esta vez, al terminar el Censo Nacional de Población y Vivienda, si hubiera algunas localidades de donde no pudo ingresar se integrará la información para conocer las causas por las que no se entró.
El funcionario destacó que en general la población afortunadamente sigue teniendo mucha confianza en el censo.
El presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía informó que el Censo 2010 tendrá un costo de 6 mil millones, con el esfuerzo de 180 mil personas que serán contratas, de éstas 106 mil en calidad de encuestadores. En Guanajuato contratarán 7 mil personas para encuestar los 46 municipios.
“La inversión total en el censo rondaría los 6 mil millones de pesos, es un 15% de lo que les va a costar a Estados Unidos”, expuso Eduardo Sojo.
Los resultados preliminares del censo se harán públicos en diciembre y los definitivos en el primer trimestre de 2011.
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