La nueva frontera de la sostenibilidad
Durante años, el debate sobre la sostenibilidad empresarial, especialmente en industrias de alto impacto como el transporte y la logística, giró casi exclusivamente sobre un eje, el carbono. La métrica eran las toneladas de CO2 y las soluciones, aunque costosas, eran tangibles como la eficiencia de combustible, vehículos eléctricos, biometano.
Las empresas comunicaban sus avances en descarbonización como prueba de su responsabilidad. Sin embargo, esa era de simplicidad terminó y ahora, la conversación se tornó infinitamente más compleja. El nuevo estándar ya no es el clima; es la naturaleza.
El Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad (ISSB), la entidad que define la arquitectura global de los reportes financieros ASG, oficializó este cambio. El ISSB anunció que iniciará un proyecto formal de normalización sobre los riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza.
De manera crucial, el organismo no parte de cero, ya que construirá sus normas sobre el marco ya desarrollado por el Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera Relacionada con la Naturaleza (TNFD). Este movimiento es la señal inequívoca de que la biodiversidad, el uso del agua y la salud de los ecosistemas dejan el terreno del "buen deseo" para entrar al rigor del reporte financiero obligatorio.
El mercado ya anticipaba esta ruta y los inversores exigen esta información. Como señaló David Craig, copresidente del TNFD, esta decisión ayuda a cambiar la mentalidad para que la naturaleza se considere fuente de riesgo, resiliencia y valor.
Emmanuel Faber, presidente del ISSB, fue aún más directo al señalar que los inversores tienen una clara necesidad de información sobre la naturaleza y la adopción voluntaria previa al anuncio del ISSB valida esta demanda, lo que ocasionó que más de 730 organizaciones globales ya se comprometieron a reportar bajo el marco TNFD.
En México, esta visión estratégica ya distingue a los líderes, por ejemplo, el sector del transporte, centró su narrativa climática en la reducción de emisiones. TRAXION, el operador de logística y movilidad más grande del país a cargo de Aby Lijtszain, identificó que ese enfoque era insuficiente para gestionar los riesgos futuros.
La adopción temprana del marco TNFD por parte de TRAXION revela una profunda comprensión del nuevo escenario, tal y como su director de Sostenibilidad, Daniel Wasserteil, explicó el compromiso de la compañía con el planeta va más allá de abordar el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que se extiende a la preservación de los ecosistemas naturales.
La empresa de logística y movilidad completó su primera evaluación de impactos relacionados con la naturaleza en 2024, y así se convierte en la primera del sector en México en adoptar este estándar.

