Mérida, Yuc.- En medio de las pretensiones de los concesionarios del transporte urbano de aumentar la tarifa a 10 pesos por adulto, ayer ocurrió en el centro de la ciudad una de las muchas irregularidades que se atribuyen a los choferes de estos vehículos.
En esta ocasión la víctima de los malos tratos de los operadores fue un anciano de 68 años que sufrió un ataque cuando viajaba en un autobús, pero en lugar de recibir ayuda fue bajado y tirado en la vía pública.
De acuerdo con lo que se informó, al sexagenario le dio un ataque en un autobús de la ruta Mulsay, pero en lugar de ser auxiliado por el chofer, éste y otro individuo lo bajaron de la unidad para dejarlo tirado en el parque de San Juan, en pleno centro de la ciudad, donde testigos avisaron a la Policía Municipal y fue trasladado al O’Horán de emergencia porque presentaba un evento hemorrágico craneal.
Los hechos sucedieron al mediodía de ayer, cuando este abuelito estaba a bordo del citado autobús y comenzó a sufrir ataques que le hicieron desvanecerse en tres ocasiones.
Al darse cuenta de lo que sucedía, el chofer detuvo el autobús en el parque de San Juan, en pleno centro, por lo que los demás pasajeros pensaron que auxiliaría al anciano o solicitaría los servicios de emergencia, pero en lugar de eso y con la ayuda de otro individuo –con el que estaba conversando- cargaron de hamaquita al sexagenario, lo bajaron y dejaron tirado sobre la explanada del monumento a Benito Juárez. Luego los dos sujetos abordaron el autobús y continuaron el viaje.
Estaba inconsciente
Este hecho fue visto por un agente de la Policía Municipal de Mérida, que se acercó a averiguar qué sucedía, por lo que se dio cuenta que el anciano estaba inconsciente y no reaccionaba, de modo que solicitó los servicios de emergencia.
Al lugar llegó el paramédico Lobo 4 de la Policía Municipal, así como la ambulancia 019 de la Cruz Roja, por lo que coincidieron que el sexagenario presentaba un evento hemorrágico cerebral, de modo que fue trasladado al hospital O’Horán.
Como hemos informado en los últimos días, los concesionarios del transporte urbano presentaron una solicitud para aumentar a 10 pesos la tarifa para adultos y a seis la de niños, estudiantes y personas de la tercera edad con credencial.
Sin embargo, el director de Transporte del Estado de Yucatán (DTEY), Humberto Hevia Jiménez, descartó un alza, “ya que por ahora la prioridad es el reordenamiento y la modernización del servicio”.
También en muchas ocasiones hemos publicado casos de maltrato contra personas de la tercera edad, ya que con la credencial reciben un descuento del 50% de la tarifa, lo que molesta a los concesionarios y, principalmente, a los choferes, que argumentan que sus ganancias se ven reducidas.
Ante esto, el gobierno ha hecho varios llamados a evitar estos casos de maltrato, sin que hasta ahora surtan efecto esos exhortos.